miércoles, 25 de enero de 2012

La Lección

Ha pasado un poco más de un año desde que escribí la última vez. Creo que había olvidado cómo hacerlo.
La idea de escribir y sobre todo de tener un blog donde quizás nadie lo lea, me hace sentir cibernéticamente rara, así es...Rara!
Curioso, porque a pesar que sigue el estigma del diabético que contagia las 7 plagas del infierno y que si tiene hijos ellos también serán portadores de la plaga (cosa que es Farza), la sensación de escribir en el vacío cibernético me hace sentir rara.
Les cuento, en este último año me han pasado muchas cosas. Cosas que despertaron la felicidad en mí, como también penas que finalmente me desmoronaron, física y emocionalmente.

La lección que aprendí estimados lectores, fue muy grande. Pero lo que no quiero precisamente es contagiarlos de una inútil pena que no me sirvió para nada, sino que contarles cómo estas penas pueden afectar a esta especial y a la vez maldita enfermedad, que aunque a veces no quiera aceptarla, es tan parte de mi que creo que se ha vuelto insisiva e inclusive mi alter ego.
Así es, mi alter ego durante tooodo este año.
Siempre me he caracterizado por ser alegre, aunque no lo quiera reconocer, pesada, mal genio y muchas cosas más que latean ser detalladas y durante todo este año 2011 que pasó se fueron opacando, y quien tomó ese lugar? Chan Chan! Sí...mi dulce diabétes...Alegre de existir, pesada y mal genio, provocativa y sin razón...a veces insultante a mi abatido intelecto que trataba de dominarla, pero no podía.
La verdad es que no pueden existir dos Valentinas en un mismo cuerpo...es desagradable y se ve un poco psico. (Que conste que este crecimiento de la "otra" Valentina es sólo metafórico, no vayan a creer que soy una demente suelta por las calles derramando azúcar por los poros).

Y así continuó este 2011, la Yo real de carne y hueso feliz de haber encontrado la tranquilidad en mi corazón y la desubicada y desagradable "Daria", así la voy a llamar, cagándome la onda y sobresaliendo más que yo! Nica..Nica...Nica!!!
Lo patético de todo esto es casi todo el mundo conoció a la terrible Daria, personas que no debieron cruzarse con ella, porque Yo sabía lo dañina que es y llegó un punto en que se descontroló, con visitas terroríficas a distintos Hospitales y Clínicas y con mis apoyos emocionales pendiendo de un hilo por esta estúpida Daria.
Ahora bien, debo confensarles que me ganó...en todo sentido y me abatió. Entre en una molestosa depresión, que seguramente venía atormentándome desde hace un rato.
Me enfermé, resfrié, me puse ojerosa, cosa que naturalmente ya lo soy, esta vez se me notó. Y Daria boyante de energía y dulozor que me daba escalofríos.

No lo pasé bien estimados, la Yo se convirtió en Daria y se volvió cruel, despiadada le hice daño a mucha gente y lo más importante fue que la Yo, la Valentina se escondió. Se fue...
Se quedó como una musulmana escondida detrás de un velo negro que no la dejaba ver la realidad en que estaba.
Daria destruyó una parte importante de mi vida que junto a esa depresión latente, terminaron por disminuirme. Me sentí engañada, Daria y La depresión formaron una relación en la cual se llevaban muy bien y me apuntaban con el dedo con risas sarcásticas diciéndome:- "te cagamos jejejeje"...Lo sentí y lo viví...me fui al lado oscuro y resucité jajajaajajajajjajaaa...que cursi..pero es verdad.
La lección es: "No permitas que te pasen a llevar sin tu consentimiento"...eso no lo digo yo...lo dijo Roosevelt, pero tiene razón...y mucha.
Ahora Daria está bajo control, terminó su relación con La depre y Valentina ha vuelto a sonreir...

No puedo prometer que Daria no volverá, pero si les aseguro que haré todo mi esfuerzo en que no me vuelva a ganar y menos opacar, porque definitivamente "Mi otro Yo" es el "otro", no Yo.

martes, 21 de diciembre de 2010

Y Ahora Qué?

Con lo único que puedo empezar es diciendo: -"Al fin se está terminando éste año!!!".
Un resumen más bien resumido? Más complicado que fácil, pero después de tantos tropezones, separaciones y complicaciones varias puedo volver a decir, que "Al fin se está terminando éste año!".
Y ahora qué?...mmm...creo que después de todas estas experiencias, lo que sigue claramente es muucho más sencillo.
Ya los latié con el tema de la aceptación, que está más que asumido y con el recomenzar y creer otra vez.
Francamente mi vida se ha redireccionado nuevamente, pensando sólo en lo positivo que puedo conseguir de mis propios logros.
El "ahora qué", lo puedo implementar a la simple reflección, de poder lograr todas las cosas que me proponga, sin dejar de lado todas las experiencias, buenas y malas que tuve en este 2010.
Conclusiones? ...Muchas, pero creo que sólo vale la pena comentar una...
Dadas las circunstancias de mi vida en este año, creo que la de una persona dibética, ya es lo suficientemente restringida, como para seguir restringiendo todo el resto que nos acompaña.
La conclusión más importante, es no dejar de cumplir lo que te propongas, no dejar pasar la vida "cumpliendo" con cosas que, a veces,ya no tienen sentido.
Lástima que mi vuelco sea criticado por muchos, pero considero que la vida ya delimitada, no puede seguir siéndolo porque a otros les parece.
Les hablé de lo importante que es la aceptación, y como tal, se debe cumplir en todos los aspectos de nuestra complicada vida.
Después de 1 año 4 meses, recién puedo reconocer todo lo que me ha costado volver a aceptar mi diabetes, reconciliarme con ella, y volver a quererla parte de mi vida.
Ahora sí que la quiero, y ahora siento que si ella no estuviera conmigo, yo no sería en gran parte, la persona que soy.
Y finalmente ahora qué!, se preguntarán ustedes.
Ahora que he vuelto a querer lo que nunca se ha ido, es importante reconocer que estoy empezando a difrutar la vida otra vez.
Mi consejo? No se dejen engañar por el "optimismo finjido". Porque ese, no existe!
Sólo existe la autenticidad y la franqueza de asumir, que no todos los momentos complicados son eternos.
Se los aseguro!

martes, 2 de noviembre de 2010

Creer...otra vez!

Dada las circunstancias, creo que esta nueva publicación es un tanto más pesimista...que las anteriores.
Después de este laaaargo año, lleno de altos y bajos, he llegado a una nueva conclusión en mi vida: Si quiero seguir avanzando, debo Creer...otra vez!!!.
OTRA VEZ! ésa es la GRAN frase...Creer? todos lo hacemos de una u otra forma, con más o menos dificultad, pero el "otra vez", es detrminante para seguir avanzando, seguir moviéndonos por donde nos disponíamos. No desviarnos, porque al hacerlo dejamos de creer.
Las incipientes y molestosas preguntas que me han cansado, más que hastiado, son: "Y el hermanito"?..."y cuándo el otro hijo?"...etc, etc y más etc...
"Creo" que tener hijos, ser mamá es lo mejor que puede existir en la vida de una persona, no existen palabras para poder describir tal felicidad.
Pero hasta dónde somos capaces de llegar? Cuántos sacrificios podemos hacer para ser padres?
No me refiero a los sacrificios económicos, fiesteros y solitarios. Me refiero a sacrificios sometidos a presiones físicas.
Ya ustedes saben que soy insulinodependiente, y que tener hijos, me es un tanto complicado, por lo que en "nuestro" caso, queridos diabéticos, es un sacrificio poner bajo estrés nuestro cuerpo, aunque los resultados sean más que hermosos!
No sé cómo explicarles bloggers, sólo siento que será un estado de temor lo que tengo ahora?
o más bien rechazo?...aún no lo resuelvo, pero lo que sí tengo claro es: Cuánto estamos dispuestos a sacrificar y a dar por lo que queremos? Yo ya dí mi primer paso...estaré "Creyendo...otra vez" en conseguir mi segundo?...Ayúdenme ustedes.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Recomenzar

Uffff!!!! Sí, he dejado botado este blog querido público. La única excusa que tengo, es debido a mi inconstancia deliberada que difícilmente me permite terminar las cosas que empiezo.
Un mal que no es tan bizarro en las tantas cabezas que contamos en "Shilito Lindo".
Pero bueno, les prometo volver a encantarlos, mis humildes lectores y seguir informándoles de la vida de este diabética gozadora de males necesarios.

Ahora, para ponerlos al tanto de lo que ha pasado estos últimos...mmm...7 meses?
Partiré contándoles que mi hijo ya tiene 1 año... sii, como pasa el tiempo, y les puedo decir que para mi no ha sido fácil. No saco nada con mentirles y contarles una historia que definitivamente "no existe".
Lo que puedo afirmar y seguir afirmando, es que mi pequeño me hace feliz cada día y cada minuto de mi vida, pero lo difícil de este pseudo final, es volver a RECOMENZAR.
Una tarea difícil, porque es imposible no dejarse llevar por todas las cosas que me fueron prohibidas durante el embarazo.
Estamos hablando solamente de cosas "consumibles", ya que el carrete no existe!! Comprenderán ustedes por qué.
Pero todas las pastas, completos, fritangas y copetes calóricos, debo confesar, que los he consumido a destajo este último año.

MALA COSA! dirán ustedes, y mi mamá, mi doctor y todos, pero entiéndanme. No lo hago siempre, pero necesito volver a saborear esos gustos malignos para el hígado que hacen que mi paladar tirite de emoción al comer una empanada frita...y de quesoo!!! Tomar una deliciosa cerveza extremadamente helada y comer, comer y comer.
Lamentablemente el sentido de este blog a girado en 180 grados, ya que desde un principio fue tomar conciencia de que la comida sana, para nosotros los diabéticos, es fundamental para el cuidado de nuestra salud.
Mi ejemplo, como ustedes podrán darse cuenta, no es el de los mejores, pero sí es el más real y sincero. De que a veces una vida llena de restricciones hace que nuestras debilidades se asentúen y que lamentablemente terminemos contradiciéndonos de lo que hacemos, aunque sea por un tiempo.
Para finalizar, les comento que dentro de mis planes futuros, está retomar mi "OLD FOOD", osea mi antigua alimentación, porque aunque esta sea rica...definitivamente es "tóxica".
Pero eso es para otro día, lo que les puedo acosejar diabéticos, diabéticas, gordos y flacos...es que "en el disfrutar no hay engaño", mientras no le mientan a su conciencia y le hagan creer que está todo bien, porque NO ES ASÍ.

martes, 2 de febrero de 2010

Contando y Contando

Después de pasar por todas estas experiencias enriquecedoras del alma y de nuestra mente, creo que llegó el momento de "contar".
Contar todo lo que me está ocurriendo, contar las veces que dudé de lo que tengo y que finalmente lo acepté tal como es, porque está muy bien dicho que "es lo que hay".
No peco de ser conformista, solo cuento lo que tengo, y no paro de contar, porque ahora es infinito.
Es infinito lo que me ha entregado la vida este último tiempo, y como es parte de mi todo, creo que es momento de aceptar "todo" de una vez por todas.
Después de años de tener una condición limitante, tanto física como socialmente, he llegado a la conclusión de que es hora de poner punto final a los augurios obsoletos y "mala onda".
Muchas veces me condicionaron a anhelar cosas que jamás iba a tener, pero que finalmente las logré, con menos o mayor esfuerzo las tuve igual.
Independientemente de la viejujilla incrédula mala sangre, que disfruta otorgando malos presagios, que al final lo único que logran es "cagarte la onda", y empezar a convertirte en una pseudo jóven amargada que apresuró su vejez, gracias a una señora que sí se amargó tempranamente.
Es importante creer que las cosas funcionan y se pueden lograr. Que el comercial de Soprole de los años 90' tenía algo de cierto, que "lo podemos lograr", pero lo más importante es aceptar.
Aceptar lo que tenemos al rededor y claramente "aceptarnos".
Que si somos gordos o flacos no nos determina como personas, ni como seres pensantes.
Y que si somos diabéticos, no somos inválidos que desarrollan una plaga indestructible, ni que mutan cada vez que les falta o sobra el azúcar. Lo que sí les puedo asegurar, que nos amargamos o no endulzamos de vez en cuando, nada más.
Pero como bien dije anteriormente "es lo que hay".

martes, 22 de septiembre de 2009

La nueva etapa

Ha pasado tiempo de que no escribo, pero mi ingratitud con este blog es porque me pasó lo mejor que le puede pasar a un ser humano, y en mi caso a una mujer: SER MAMÁ.
Esta es la nueva etapa que todos debemos enfrentar, asumir y querer. Ya que afloran todos nuestros miedos y todas nuestras capacidades como personas. Creo que somos capaces todos de aprender a querer y también de cuidar de lo que es más nuestro, y este nuevo cambio nos pone a prueba, para ver si podemos seguir mejorando nuestra vida.
En mi caso, y como quedó demostrado en los escritos anteriores, es la diabetes.
El ponerme a prueba, para ver si era capaz de mejorar mi estilo de vida para poder gestar a este nuevo integrante de mi vida, el derribar las barreras mitológicas de aquellos pesimistas que pensaron que esto no podía ser, y que en cierta forma me estaban arrebatando esta experiencia que me deja sin palabras.
El "si uno quiere puede", se puede. Y queridas futuras madres diabéticas, las prohibiciones en el embarazo no existen, sólo el disfrute y goce de este pequeño ser que crece día a día.
Los sacrificios quedan minúsculos, al lado de la satisfacción de ver a tu hijo nacer.
Pero sí, existen las dietas nefastas que permiten un mejor cuidado en el embarazo, pero nada que no se pueda cumplir, junto a la asesoría de un médico que te de confianza y que esté pendiente de este primer proceso, hacen posible que todas nosotras, que nos daban por acabadas en nuestra etapa de reproducción, nos puedan hacer felices.
Debemos estar alertas sí, en todo momento y circunstancia. Cuidar nuestro cuerpo lo mejor posible, ya que este es nuestro templo que nos permite realizar estos desafíos que nos hacen crecer cada día más. Y que nos convencen de que nosotros tenemos el control de nuestras vidas y nuestro cuerpo.
De que la juventud es para gozarla, pero eso no significa dejar de lado esta etapa de ser padres, porque ésta tambien forma parte de nuestra juventud y de toda la energía que podemos entregar física y emocionalmente.
Quiero darle gracias a mi familia por entregarme todo el apoyo y ayuda, y sobre todo confianza, que hizo posible concretar mi nuevo rol.
También darte gracias a tí, mi compañero, que sin tí esto no hubiese sido posible. Que demostraste que mi "problema" también es tu "problema", y que hiciste más llevadera mi enfermedad, dándome ánimo y haciéndome sentir que esto no fue nada. Y que también gracias a ti, nos podemos enfrentar juntos ante esta "Nueva etapa".
Hay que recordar que mientras menos años pasen de nuestra diabetes, más cosas podemos cumplir sin que nuestro cuerpo nos falle. Y que debemos cuidar nuestro cuerpo, nuestra salud es lo más importante, ya que sin ella, no podemos hacer a estos bebés que nos llenan de alegría y felicidad.
Mi consejo para aquellas mujeres que quieren ser mamás, y que en algún momento surgió una piedra en su camino.:- Las piedras en el camino solo nos hacen tropezar, pero ninguna tiene la capacidad de hacernos caer, eso sucede solo si nosotros queremos.-

domingo, 14 de junio de 2009

El paso siguiente

Sin considerar los aspectos culturales de nuestro "Chilito", el ser una mujer de 25 años diabética, ya no es considerada una maldición juvenil. Y creo que el paso siguiente para nuestra evolución personal, es la propia aceptación de ciertas dificultades kármicas que afectan el desarrollo de nuestra querida y nunca bien ponderada "AUTOESTIMA".
Si bien el apoyo familiar, amistoso y todo lo que nos rodea, es fundamental para asumir una enfermedad, que más bien es monótona y no recurrente de afecciones sentimentales; lo más importante es pasar por las tediosas etapas de la innecesaria aceptación.
Los invito a unirse a este flashback, que nos convoca a mis "dulces 19".
Edad traicionera y vulnerable, donde todo lo que nos dicen nos afecta de forma devastadora y ridícula, y donde carecemos de conciencia para darnos cuenta, de que en realidad-"la estamos cagando", de que nuestro cuerpo es fuerte y jóven y que ilusamente también es indestructible.

El creerse Superman, La Mujer Maravilla o cualquier otro súper héroe, no nos lleva directamente a comprender el balance natural de las cosas, si no que nos lleva a mandarnos más pastelazos.
Pero Señora, Señor, Papi y Mami, este proceso no es eterno.
Es algo natural que tenemos los seres pensantes que creemos en el engaño de nuestro propio intelecto. Por lo que, no hay que ponerle tanto color a los pincelazos que damos para corregir los problemas existenciales de "los hijos" que estén pasando por esta fase.

Asi que "Hijos de la fase", sí se puede carretear, sí se puede comer completos para el bajón, tomarse unas piscolas, (esporádica no periódicamente) llevar una vida normal, sin pensar que te vas a morir de un coma de lo que sea.
Pero mi consejo, como una dulce vividora y amante de la buena vida,- "Encuentren Su propio balance natural, su límite gozador que los ayudará a ser responsables, no dejen de lado el Ser diabéticos, porque es es lo que somos y tenemos que aprender a disfrutar lo que tenemos y no quejarnos de lo que nos falta, porque a veces, ni siquiera es necesario. "